Una luz roja y brillante rosó mis párpados
El sol me saludaba en la madrugada
Las polvosas persianas de mí cuarto
Impedían que sintiera la tierna luz
Querían que pensara que aún era noche
Intentaban engañarme
Y tristemente les creí…
Pequeña ingenua, cerré los ojos
El sol no olvidaría un momento el mundo
Solo para chocar su nariz contra mi ventana
El sol no cubriría la noche con luz
Simplemente por mi miedo a la oscuridad
Mi rostro quizá parecía dormido
Tal vez mis ojos estaban cerrados
Y sin embargo no podía soñar
Mis párpados reflejaban solo un gran vacío anaranjado
Abrí los ojos de nuevo…
La luz se había acomodado en cada rincón
Esta vez, las persianas no lograron ocultarlo
El sol estaba allí, sentado en la ventana
Me levanté de la cama
Con pasos pausados
Caminé hacia mi destino
Mis pies sentían el piso frío
Que lentamente erizaba mi piel
Y mi sillón blanco, de sentir amable
Me invitó a sentarme
El Sol comenzó a regresar al cielo
Se alejaba lentamente
Y con una sonrisa cegó mi vista
Un último reflejo de calor
Me dijo adiós con un respiro
Caí, me desvanecí lentamente
La lágrima pausada de la noche
Se resbaló hacia mis labios
Decidí levantar la mirada
Ignoré el ardor en los ojos
El sol seguía allí
En la lejanía aún me sonreía
Aquel tiempo de oscuridad fue sombrío
Olvidé por un tiempo como era la luz
Me cegué ante la bella palidez
El sol, de voz sincera
Con un soplo de calor me dijo al oído
La luna se ah ido, la noche se fue.
"Cuando más oscuro se vé, es por que no tarda en amanecer"
Hay veces en las que te miras al espejo y solo vez un gran vacío,tienes unas ganas inmensas de llorar, y no te acompaña nada más que la soledad. La tristeza no se puede evitar, pero tampoco es bueno opcarla con una sonrisa, si hay dolor en el corazón, no se oculta, se vive... siempre hay una salida.
Anna.........!